La concienciación social sobre la necesidad de preservar el medio ambiente va extendiéndose, también en el sector de la construcción y la arquitectura. Charlamos con los arquitectos Marc Alventosa y Xavi Morell, del estudio Alventosa Morell Arquitectes, para conocer su metodología de trabajo y saber cómo consiguen proyectar obras eficientemente energéticas.
1. ¿Cuándo y cómo nace Alventosa Morell Arquitectes?
El estudio propiamente dicho nace aproximadamente hace cinco años, después de que el despacho Alventosa Arquitectes (formado por Josep Maria Alventosa y su hijo, Marc Alventosa) colaborase con Xavi Morell en distintos proyectos y concursos. Tras ganar un concurso público en Lleida, nos asociamos para dar continuidad a nuestra forma de entender la arquitectura, basada en hacer al usuario más partícipe del proyecto, enseñarle a vivir y disfrutar de su casa desde un punto de vista energético e implementar la industrialización a una escala más doméstica.
2. ¿Cómo y por qué decidís especializaros en proyectos de eficiencia y ahorro energético?
No fue una decisión tomada ipso facto sino que siguió un proceso natural. La experiencia acumulada en la preindustrialización en obra pública nos animó a aplicarla en la vivienda unifamiliar. Una de las ventajas de los proyectos preindustrializados es que hay pocos cambios durante el proceso de ejecución, es decir, lo que se proyecta se acaba ejecutando. Además, se disminuye el tiempo de ejecución y se fomenta el ahorro económico.
3. ¿Qué proceso seguís a la hora de proyectar una vivienda o equipamiento?
En Alventosa Morell nos gusta controlar todo el proceso ejecutivo. Consideramos que es fundamental hacer un estudio climático del entorno donde proyectaremos la obra. Para ello, recopilamos los datos climáticos de los últimos cinco años de la estación meteorológica más cercana al solar. Éstos nos revelan las características de temperatura, radiación solar, viento, lluvia o humedad relativa del solar, factores clave para proyectar una edificación con cierta lógica y aprovechar al máximo la climatología de la zona, reduciendo al mismo tiempo el uso de energías activas. Con un software muy completo, calculamos la cantidad de energía que se consumiría en un año y lo comparamos con una construcción convencional.
4. ¿Podríamos decir que el estudio climático es la esencia de vuestro trabajo?
Concebimos la arquitectura como la combinación de diseño y construcción, es decir, la creación de espacios respetuosos con su entorno, que generen confort a los usuarios y que respondan a las necesidades del cliente.
Para lograrlo, el estudio climático es un instrumento imprescindible porque nos permite definir qué estrategias pasivas debemos aplicar según los factores climáticos de la zona. Siguiendo este proceso, hemos logrado un ahorro energético del 77% en calefacción respecto al edificio de referencia.
5. ¿Algún material predominante en los proyectos de Alventosa Morell Arquitectes?
La madera es el material que, desde hace unos años, vertebra muchas de las obras que hemos construido y que construiremos. Nos apasiona, tiene unas prestaciones óptimas y se adapta perfectamente a los sistemas constructivos preindustrializados.
Si bien es cierto que nos gusta trabajar con diferentes materiales, la elección de unos u otros responde a las características que definen cada proyecto: flexibilidad, factor solar, factor de transmisión, huella ecológica, precio, etc.
6. La Casa GG es una estructura prefabricada de madera de seis módulos. ¿Cómo conseguís que 110 m2 de construcción se calienten con un único radiador de 1kw utilizado dos horas al día?
Después del estudio climático, buscamos que la construcción fuese lo más estanca posible y que estuviera muy bien aislada. Optamos por diseñar una fachada ventilada con 14cm de aislante de celulosa, que provoca que el aire caliente generado en el interior sea retenido gracias a una resistencia térmica muy elevada.
Otro reto alcanzado con Casa GG es el tiempo de construcción: bastaron cuatro meses para ejecutar el proyecto, ya que los seis módulos de madera se construyeron en un taller y fueron trasportados hasta el solar del Montseny.
7. ¿Algún proyecto entre manos que podáis desvelarnos?
Actualmente, estamos trabajando en cuatro casas particulares bioclimáticas que se encuentran en fase de construcción o de licencia de obra y, en el ámbito de los equipamientos, estamos construyendo una guardería en Lleida. Además, hace poco ganamos un concurso privado para la proyeccción de un showroom de una reconocida marca de electrodomésticos, un encargo que nos hace mucha ilusión.
8. Cómo expertos en eficiencia energética, ¿qué consejos daríais a un estudiante o arquitecto que quisiera encarar su trayectoria hacia la arquitectura bioclimática?
Nuestra experiencia nos dice que ser curioso e inquieto es fundamental. Le recomendaríamos que se empapase del mundo de la bioconstrucción y de los materiales, que estudie las estrategias pasivas que se podrían aplicar teniendo en cuenta los factores climatológicos y que realice cálculos de consumo energético.
Índice de lo que podrás leer en este artículo
En clave personal
– ¿Cuáles son vuestros arquitectos de referencia?
Cada uno tiene sus preferencias personales pero a nivel local, compartimos fascinación por el trabajo de Josep Lluis Sert, Josep Antoni Coderch o Josep Maria Sostres, por mencionar algunos. También la arquitectura portuguesa -representada por Álvaro Siza o Eduardo Souto de Moura- es una referencia, así como el arquitecto alemán Herman Hertzberger.
Nos gustaría resaltar las figuras de Josep Fuses y Guillermo Bertólez por su valor didáctico. A pesar de no ser internacionalmente conocidos, tuvieron una influencia abismal en nuestra manera de vivir y entender la arquitectura.
– ¿Qué obra ha influido en vuestra manera de hacer o concebir la arquitectura?
Es complicado escoger una obra porque nuestra trayectoria y experiencia también va evolucionando. A nivel de materialidad, nos inspiramos en la arquitectura portuguesa, pero también nos resulta inspiradora la sinceridad y la esencia constructiva que transmiten las obras de Mies Van Der Rohe, Peter Zumthor, Bernardo Bader…
– ¿Cuál de vuestras obras os representa mejor y os sirve como carta de presentación?
Nuestro proyecto fetiche es Casa GG, porque reúne la materialidad, la sinceridad estructural, la eficiencia energética y la conexión con el entorno que nos gusta plasmar en nuestros proyectos.
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