En la actualidad, cada vez nuestra sociedad vive más conectada a los diferentes medios técnicos que favorecen y facilitan el día a día. Uno de los aspectos que más trascendencia va tomando a la hora de construir una vivienda es su concepción asociada a la domótica,  especialmente enfocada a la automatización, el uso de componentes electrónicos dentro de la propia vivienda que permitan controlar de forma automática los diferentes aspectos y necesidades del hogar.

A continuación te proporcionamos las pautas para entender la domótica y enseñarte a tener en cuenta sus dificultades, sus ventajas y las necesidades que este sistema requiere para su instalación en cualquier construcción.

¿Qué es la domótica?

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Un buen principio es la propia definición de domótica, esta definición nos permitirá entender las sinergias entre los diferentes sistemas que se requieren para su proyección.

Se puede denominar a la domótica como el conjunto de sistemas que son capaces de automatizar una vivienda, proporcionando una mejora en el bienestar y la seguridad del usuario, así como aportando un gran valor en el ámbito del ahorro energético.

Hace unos años, lo que se veía como una opción residual por sus costes, ha ido alcanzando una fuerza considerable en los nuevos proyectos. Es cierto que requiere de una inversión superior al inicio en una obra tradicional, pero la amortización de costes es rápida para el usuario.

Uno de los factores importantes sucede por ejemplo, en la capacidad de crear hogares altamente confortables para personas con necesidades especiales, que posean algún tipo de discapacidad, sistemas confiables y de mejor agrado para el usuario.

Si al inicio de esta definición tratábamos la domótica como el conjunto de sistemas, debemos considerar que son muchas las ramas que intervienen para su ejecución siendo necesario su intervención conjunta a fin de crear un hogar realmente domótico. La electricidad, la electrónica, la informática y las comunicaciones son ejes fundamentales dentro de la ingeniería del hogar.

Domótica: el proceso de automatización

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La automatización de una vivienda es aplicada por dispositivos o por componentes electrónicos. Para elaborar la proyección de una vivienda que cuente con funcionalidades automáticas se debe diseñar pensando para cumplir los requisitos necesarios en la aplicación domótica con dos objetivos muy definidos: el ahorro de costes innecesarios en el desarrollo del proyecto y la máxima funcionalidad de los equipos y componentes utilizados.

La domótica enlaza los componentes inteligentes incorporados con los dispositivos comunes de las viviendas para dar como resultado un hogar automatizado. Cada dispositivo o componente inteligente debe estar protegido para lograr una mayor eficiencia y evitar gastos innecesarios en mantenimiento, así como resultar un componente que interfiera causando perturbaciones en la red doméstica.

Los dispositivos electrónicos nos permiten el control inteligente de las viviendas, pero no solo es importante a efectos de ejecución de órdenes sino, es igual de importante funciones adheridas como por ejemplo la capacidad de los sistemas automatizados de recopilar información percibida por los dispositivos electrónicos como sensores o detectores de movimiento, procesar este tipo de información y que los propios dispositivos electrónicos realicen alguna acción.

Otro de los aspectos interesantes cuando hablamos de automatización, es la posibilidad de interactuar con la vivienda sin la necesidad de estar en el interior, de forma que al llegar a nuestro hogar se hayan ejecutado las órdenes como por ejemplo el encendido de la calefacción.

Ventajas de la domótica

Los beneficios de la domótica en el hogar son incontables, pero podemos concretarlos en tres pilares fundamentales.

Seguridad: En nuestro hogar necesitamos sentirnos seguros y gracias a elementos de la domótica lograr viviendas más seguras es sencillo. Podemos monitorizar lo que sucede remotamente en nuestra vivienda, instalación de detectores de movimiento o activación de alarmas los cuales pueden estar vinculados a la activación de cámaras de vigilancia, cierre de puertas o persianas, así como también dar aviso al usuario sobre lo que está sucediendo en su hogar.

Gestión de la energía: El medio ambiente es uno de los grandes perjudicados por el ser humano. Los residuos que generamos y los consumos energéticos constituyen un gran problema social que repercute directa o indirectamente en la salud de los habitantes.

Los proyectos domotizados presentan una serie de elementos muy interesantes, como un mejor control de la iluminación en interiores y exteriores de la casa.  Por ejemplo, podemos encontrar productos como los detectores de movimiento Siemens y BJC que una vez detectan el movimiento en una estancia gestionan la iluminación. Esto es muy en hogares con niños, que entran y salen de las habitaciones sin prestar atención al consumo energético. En la siguiente imagen, podemos ver un ejemplo de un detector de movimiento de techo de la gama BJC. También puedes consultar aquí, los detectores de movimiento Siemens Delta.

Accesibilidad y confortabilidad: Ayuda a mejorar la movilidad de las personas que poseen algún tipo de discapacidad teniendo el control de cada elemento de la vivienda como cerrar o abrir puertas, regular los electrodomésticos etc…

Fuente imagen: BJC.es

Control de red de la vivienda: Topologías de la domótica

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La topología de la domótica podemos denominarla como la estructura de la red sobre la que se implantarán los elementos técnicos.

Existen diferentes tipos de topologías en función de la red: Bus, estrella y árbol. Ésta última es la que está asociada al control centralizado, en la que todos los elementos están conectados a una toma central que controla el tráfico de la red.

En todos los sistemas de domótica o sistemas automatizados, los elementos de control deben intercambiar información unos con otros, por ejemplo, señales transmitidas, sistemas que se utilizan para trasmitir señales radiales y sistemas que poseen en parte señales que se pueden acomodar y permitir transmitir mediante la propia instalación eléctrica de la vivienda.

Tener una red de protección adecuada contra sobrecargas transitorias como las que se pueden presentar en las redes eléctricas son fundamental para evitar daños en toda la instalación domótica.

Hay que tener en presente que en las redes domóticas puede existir riesgos que pueden dañar o malograr el funcionamiento de los dispositivos, por ello, como en cualquier instalación que conlleva una instalación eléctrica, debemos tomar las medidas necesarias de seguridad para garantizar un buen funcionamiento, así como las protecciones pertinentes en los dispositivos electrónicos presentes en la vivienda.

Si te ha gustado este post, puedes leer más acerca de los hogares inteligentes en nuestro post sobre las viviendas inteligentes.