En esta época de evolución constante de las técnicas de arquitectura tienen en cuenta prácticamente todo lo relacionado con la proyección y construcción de la obra.

La acústica arquitectónica estudia los fenómenos sonoros de los edificios para utilizarlos, en muchos casos, como un elemento más a la hora de proyectar diferentes ventajas o beneficios en los que el sonido, aunque parezca algo poco trascendente, juega un papel fundamental.

En BJC te explicamos más acerca de los conceptos de ruidos y aislamiento en la arquitectura de las ciudades del futuro.

¿Qué es la acústica arquitectónica?

La acústica arquitectónica es una técnica que estudia los diferentes fenómenos vinculados con una propagación fiel, funcional y adecuada del sonido en un determinado recinto, ya sea una vivienda o un estudio de grabación.

El problema de la aislación acústica también será abordado desde la acústica arquitectónica.

La función de una determinada sala como espacio para grabación de música o conciertos, debe tener cualidades acústicas adecuadas para dicha aplicación.

La acústica arquitectónica tiene principalmente tres campos de actuación:

  • Combate del ruido
  • Acústica de recintos
  • Acústica y urbanismo

El combate del ruido

Lo primero que debemos discernir es la diferencia entre sonido y ruido. El primero, es un fenómeno vibratorio que se propaga a través de un medio elástico y es percibido mediante el oído humano.

Para que se produzca un sonido, es necesaria la existencia de una cadena acústica conformada por una Fuente del sonido, la que genera el fenómeno vibratorio, un Medio, material y elástico por el cual se propaga la onda y puede ser tanto gaseoso como líquido y sólido y un receptor que recibe la información.

El ruido, por el contrario, es un sonido no deseado y que produce un malestar en el receptor de dicho sonido. Existe una escala para medir la tolerancia de los receptores del ruido, estos parámetros tienen que ver con la intensidad del sonido o el nivel de presión sonora, que en el caso del ser humano presenta un umbral de dolor a 120 dB.

En paralelo, se debe considerar el tiempo de exposición. Cuando un sonido llega a provocar una presión sonora, por sí solo no alcanza el punto máximo, sino que se suceden una serie de oscilaciones que acaban provocando el dolor o la molestia en el ser humano.

Acústica arquitectónica para el hogar

Desde hace tiempo los urbanistas, en las proyecciones de las nuevas viviendas para ciudades del futuro, consideran el ruido como un problema holístico. Para ellos, es algo que se debe tener en cuenta en cada actuación arquitectónica y en cada diseño de ciudad.

A nivel doméstico, una opción recomendada para este aislamiento es la ventana de doble vidrio, tiene un coste relativamente económico y puede rebajar considerablemente el ruido del tráfico. Es cierto, que este tipo de elementos obliga tener las ventanas cerradas todo el tiempo e igualmente el sonido se puede filtrar por las rendijas de los accesos de aires acondicionados y persianas.

Carolina Rodigues Alvés, arquitecta y máster en Ingeniería Acústica y Vibraciones por la universidad de Valladolid ha iniciado una serie de informes para investigar políticas que pueden llevar a contrarrestar lo que ella ha denominado como “’paisaje sonoro”

“En Europa, más del 60% de la población está sometida a niveles de decibelios por encima de los recomendados por la Organización Mundial de la Salud, que cifra en 70 db y 100 db los adecuados para el ser humano., explica la catedrática.

Ayudas para la acústica aislante

El ruido medioambiental se debe actualizar cada cinco años en poblaciones de 100.000 habitantes, carreteras con más de tres millones de vehículos de tráfico al año, redes ferroviarias con 30.000 trenes y aeropuertos con más de 50.000 desplazamientos en el mismo periodo, según la directiva de la Unión Europea que controla el ruido medioambiental (END)

La mayor parte de los análisis se estructuran sobre los denominados mapas del ruido, estos mapas, miden la repercusión de un agente externo en lugares concretos y crea una imagen estanca, con el consiguiente problema de excluir otros lugares y circunstancias intangibles.